
Conclusión
El entorno de todas las organizaciones cambia a un ritmo vertiginoso, debido al surgimiento de nuevas tendencias relacionadas con aspectos políticos, demográficos, económicos, globales y tecnológicos, en donde no solo se compite con empresas locales como ocurría en un pasado, sino también con negocios de todo el mundo, lo que representa, un reto cada vez mayor para la supervivencia y permanencia de las empresas en un mercado determinado.
Estos fenómenos ocurren en organizaciones de todo tipo, sin excluir a grandes compañías como: Kodak o Blockbuster, que en su tiempo fueron líderes en el mercado. pero que hoy en día están obsoletas o no continúan vigentes, como consecuencia de una falta de visión y carencia de planes estratégicos que contemplaran los cambios en las preferencias y estilos de vida de los consumidores, surgimiento de nuevos competidores y nuevas tendencias tecnológicas.
Analizar el entorno, no solo previene de amenazas, sino que ayuda a las empresas a identificar oportunidades de crecimiento y desarrollo, como el surgimiento de nuevos modelos de negocio como Uber que revolucionaron los servicios de transporte, a través del uso de la tecnología y tomando en cuenta los cambios demográficos, sociales y culturales de la población.
Por lo tanto, se puede concluir que a pesar de que el entorno, al ser externo y no ser controlable, permite a las organizaciones identificar potenciales amenazas y valiosas oportunidades, que pueden transformarse en estrategias, que a su vez permitan no solo la supervivencia, sino mantener una ventaja competitiva que les permita seguir vigentes dentro del mercado.